Áuryn

Nombre de Personaje: Áuryn

Nombre del PB: Molly Quinn

Apodo (opcional):

Edad: 80 años

Edad aparente: 18 años

Género: Mujer

Orientación sexual: Heterosexual

Raza: Dragones

Conocimientos mínimos:
- Leer
- Escribir
- Nadar
- Bailar
- Música

Descripción física:

• Cabello: De color castaño rojizo con reflejos dorados, largo hasta la cintura, liso
  
• Ojos: Azules
  
• Contextura: Es de complexión delgada y delicada. Tiene una bonita figura
  
• Altura: 1,75
  
• Ropa: Vestidos sencillos de cualquier color que le queden bien, ajustados para realzar su silueta
  
• Otros: En su forma de dragón es una joven dragona de escamas del color del ámbar y ojos azules
  
• Imagen:

  Spoiler:

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Descripción Psicológica:
Desde pequeña se ha caracterizado por ser muy independiente y reservada. Siempre ha preferido la soledad a la compañía aunque no rechaza ésta última si se siente cómoda con su acompañante. De carácter tranquilo y reservado, no se abre con facilidad a los demás y es poco habladora ya que prefiere el silencio, pero aquellos que consiguen ganarse su amistad, tienen en ella una amiga leal y sincera que jamás les traicionaría por nada y con la que pueden contar para lo que sea. Noble y valiente, no duda en defender a los que quiere sin importarle dar su vida a cambio si fuera necesario.
En el amor es un alma libre. Todavía no ha encontrado a nadie a quien amar pero cuando lo encuentre lo dará todo por esa persona.
Miedo(s): Perder a sus seres queridos

Pasado:
Áuryn nació en el Poblado de los Dragones. Su padre, Vrael, era uno de los dragones más importantes de ese territorio, un noble y valiente guerrero al que se podía respetar. Desde pequeña, fue educada para ser una dragona noble y orgullosa, digna de su raza, superando todas las expectativas que tenían puestas en ella, aunque también le enseñaron a mostrarse cautelosa con los humanos. Enseguida demostró su valentía y su nobleza, aunque también desarrolló una personalidad independiente y solitaria, heredada de su madre. Conforme iba creciendo iba teniendo cada vez más responsabilidades, hasta que un día, cuando tuvo la edad suficiente, decidió marcharse para ganar experiencia en la vida y aprender todo lo que ésta pudiera ofrecerle. Se mantiene neutral en conflictos exteriores a los de su raza mientras no afecten directamente a ésta, pero siempre presta su ayuda a quien se la pide sin pedir nada a cambio. No ha tenido ningún mal encuentro con nadie, pero por si acaso y como sabe que su raza es perseguida, se mantiene en su forma humana todo el tiempo posible.